En caliente.-
Sí, pasó un día pero es en caliente todavía. Las elecciones en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires del día de ayer para algunos dejó resultados que antes eran previsibles y para otros no tanto.
La ciudadanía, la gente, o como a mí me gusta llamarlo "el pueblo" -aunque siempre tenga connotaciones con los sectores más populares pese a que esta es la ciudad más rica del país- eligió sobre 5 candidatos, aunque los tres primeros se quedaron con la mayor cantidad de sufragios.
Tratando de ser lo más objetivo posible aunque no pueda ya que mi participación política es explicita en un barrio determinado, nos encontramos con un contundente triunfo en esta primera vuelta del PRO. Ese partido de índole doméstico que esta tratando de llegar a la Presidencia y que en algunos rincones de nuestra patria teje alianzas difíciles de explicar para poder arrimar el bochín dado a su escaso (o nulo) armado, sostiene su fortaleza en la capital del país. ¿Cómo desarmar ese voto, cómo llegar a la composición del mismo? Es muy difícil. Algunos quizás votan con convicción desde la más absoluta repulsión a los sectores más populares, otros se sienten cómodos con las políticas públicas que lleva adelante, otros meramente por conservar la situación del día de hoy, y otras tantas... Me detengo en el detalle de "políticas públicas": por acción o por omisión el gobierno es directamente responsable de las consecuencias ulteriores que se vean en la ciudad, en este caso. El PRO es responsable de mejoras en el tránsito con los metrobuses (tiene plural esta palabra?), las bicisendas, bicicletas gratuitas y algunos perdidos puntos de salud, más las playas de Buenos Aires. Como también es responsable de los 5000 pibes que se quedaron sin vacantes en escuelas públicas por la inscripción on line, el paupérrimo sistema integral de salud pública, la represión de la metropolitana, la suciedad en toda la ciudad, los talleres clandestinos y sus respectivas muertes.
El marketing político le ganó a la política. Así como cuando estuvo en ANSeS impulsó todo un sistema de señalética, slogans, y demás cuestiones de maquillaje, Larreta supo entender a la perfección junto con Durán Barba que llenando la ciudad de amarillo, propaganda ininterrupida en las pantallas de las estaciones de metrobus y SubTV, empleados pagos repartiendo volantes en todas las esquinas de alta circulación, globos de colores, pelotas infladas que rebotan, sombrillas, esquineros, más el blindaje mediático fueron extremadamente eficaces. Mis felicitaciones.
Por el otro lado Lousteau. Accede al balotaje sin hacer nada. Admirable. Sin fiscales, con una militancia territorial prácticamente nula. Apoyado en el socialismo de Roy Cortina, y los cuestionados Nosiglia y una pata del radicalismo con denuncias de corrupción en la uba -el miércoles se convoca un banderazo para desplazar a Yacobbitti de su cargo-, tema que tocaremos mañana le pese a quien le pese, y le guste a quien le guste ya que según se informó hoy además del banderazo van a haber novedades en la justicia al respecto. Parte del mismo armado nacional del Frente Cambiemos con Sanz, Macri y Carrió.
Dos candidatos, un solo proyecto. Diferencias de matices, puede ser. Pero son del mismo espacio, como en la interna se decidió entre Larreta y Michetti, o el propio Lousteau y Ocaña. El 30 por ciento del electorado deberá pronunciarse por dos candidatos similares. Pero bueno, eso no era a lo que apuntaba. Voy al Frente para la Victoria. Es interesante el piso que se logró, pese a que ahora se discuta si Filmus era mejor candidato, cosa que afirmo desde mi humilde óptica que no. No solo eso es interesante sino que se consolida un nuevo dirigente en el ámbito porteño.
El Proyecto Nacional, y me animo a escribirlo en mayúscula, trasciende una elección. No es cuestión de someterse a las urnas cada dos o cuatro años. Acá hablamos de una concepción clara de la política. De que todos podamos vivir mejor. Todos. Principalmente poder brindarle a ese que menos tiene las mismas oportunidades que el que ya esta un poco mejor. Es pensar en el otro, es jugarse por el otro, por nuestro suelo, por nuestra tierra. Y puede sonar muy altruista, pero créanme que es así. Ya está, no se puede volver atrás. Culpa de Néstor Kirchner en primera instancia que despertó esas conciencias dormidas, avivó otras y animó a involucrarse a miles. Responsabilidad de Cristina Fernandez de Kirchner de hacer carne todo eso que nos conmueve, de mostrarnos el camino que a través de la política se pueden transformar las cosas.
Pero me fui por las ramas. Quería mencionar algo sobre ese 20 o 25% fluctuante en la Capital que es el que finalmente define elecciones. Evidentemente el FPV no ha sabido llegarle. No hemos sabido llegar, convencerlos con nuestras propuestas, terminar de mostrar todo lo que hemos hecho. Es una porción de la sociedad bastante heterogénea por que encontramos aquellos que creen que no necesitan del estado para desarrollar su vida cotidiana, tenemos un sector progresista y otro conservador, que generalmente siempre vira para la derecha. Sin embargo fluctúa. Así como supo votar al radicalismo, también una porción de él votó a CFK en 2011 como acompañó a Blumberg a las calles años atrás. Es muy di-símil, pero conforma un sector de la sociedad que es el que define la elección. Aquí se ha fugado a Lousteau, quien colocándose en el medio dijo el clásico "reconozco lo que esta bien pero lo malo tiro cascotazos para ambos lados". Una falacia, ya que ayer formó parte del FPV en el gobierno nacional y fue mala su gestión al frente del Ministerio de Economía y hoy a nivel nacional comparte espacio con el PRO.
En fin, la clave está allí. Ese 20 o 25, que no en su totalidad votó a ECO, sino también sostiene los históricos 4 puntos de Zamora o busca una alternativa con el FIT. De alguna manera u otra es la franja a trabajar por todas las fuerzas políticas. Mi tranquilidad que el trabajo territorial que hemos hecho junto a mis compañeros llevo al FPV en el barrio de Montserrat de 21,9% obtenidos en las PASO a 26,87% en las generales, acumulando 4,97% de crecimiento. Y como dije anteriormente, este proyecto trasciende una elección. Es una elección de vida, porque así lo creemos y estamos convencidos de ello. De que todos podemos vivir mejor.